martes, 2 de febrero de 2010

Bicentenaria

Bajo el alero del zaguán, Brenda desteje el viejo tejido invernal. Atrapada por los recuerdos, transita por veredas y patios repletos de anhelos y de futuros no nacidos. Victoriosa la patria se abre al impacto de las batallas y de los bailes de salón…donde las promesas, las que logran tomar cuerpo, lo hacen muertas, ó discapacitadas. Promesas y esperanzas que se irán sumando para dar de comer a los muertos que vendrán al encuentro de caminos polvorientos, viejos ranchos en medio de la nada., paradas de carretas con hombres indómitos buscando mujeres dispuestas…
Brenda, desteje el viejo tejido invernal…ella siempre dispuesta, siempre allí, siempre…esperando la última ronda de fusileros y el primer avemaría en la capilla. Brenda, siempre tibia y solícita, jugando a los gestos del dueño de ocasión, siempre entera y fragmentada al mismo tiempo.
Brenda, ya no se abra el impacto de las batallas y a los bailes de salón…hoy , la vieja Brenda, juega el juego del final de los tiempos…bicentenaria…colgada del retablo arruinado de miles de promesas que no llegaron a ser.

No hay comentarios: